El Grupo de Expertos Intergubernamentales en el Clima (IPCC en sus siglas en inglés) ha publicado un resumen de la primera entrega de su nuevo informe. La temperatura de la Tierra puede aumentar una media de 4,8º C al final del siglo. Es la primera parte del quinto informe del IPCC: concierne a los aspectos físicos del cambio climático, más alarmante que el precedente de 2007. Los aspectos de adaptación al cambio o de reducción de los gases de efecto invernadero se publicarán en la primavera de 2014.
Temperaturas
El IPCC estima que la acumulación de estos gases, de origen humano, es la causa extremamente probable (95%) de esta elevación de la temperatura. El calentamiento medio desde 1880 es de 0,85ºC y las tres últimas décadas son “probablemente” las más calientes desde por lo menos 1400 años.
Con respecto al periodo 1986-2005, la elevación de temperatura puede ser comprendida entre 0, 3ºC y 4,8ºC en el periodo 2081-2100.
Hielos
El banco de hielo estival ha perdido entre 9,4% y 13,6% de su superficie desde 1979. Puede desaparecer totalmente en 2050. El Antártico está sometido a las mismas variaciones.
Nivel del mar
Entre 1901 y 2010, la subida del nivel de los océanos ha llegado a 19cm. En función de las emisiones de gases en el futuro, el nivel de los mares puede subir en el periodo 2081-2100 entre 26cm y 82cm con respecto a la subida registrada entre 1986 y 2005. La cifra más pesimista se sitúa alrededor de 98cm. El ritmo de elevación es actualmente de 3,2 mm/año. Otros modelos de simulación dan una cifra más importante, hasta el doble, pero no hay consenso en la comunidad científica sobre estos modelos. Esta subida del nivel no es uniforme: algunas regiones estarán más afectadas que otras.
Eventos meteorológicos extremos
Las olas de calor van a ser más frecuentes y durar más tiempo según el co-presidente del IPCC. Con el calentamiento, las regiones más húmedas recibirán más lluvias y menos las regiones más secas.
Geo-ingeniería
Conviene estudiar unos dispositivos de manipulación del clima como, por ejemplo, la dispersión masiva de partículas en la estratosfera, para reflejar una parte de la radiación solar y enfriar el clima. El IPCC señala que el estudio de esta cuestión es una demanda de los gobiernos.
Añadimos estas otras informaciones:
El director de la política de la energía en el World Wildlife Fund (WWF) señala que la acidificación de los océanos ha aumentado de 30% desde 1900 y amenaza los ecosistemas marinos. El dióxido de carbono que proviene de la combustión de las materias fósiles –carbón, petróleo –se disuelve en los océanos y puede dañar de manera irreversible un ecosistema ya fragilizado si la humanidad no opera una transición hacia las energías renovables lo antes posible.
Por otro lado, un equipo de historiadores científicos, sociólogos y climatólogos han examinado la evolución de los informes del IPCC y comparado sus resultados a las variaciones climáticas registradas efectivamente (Revista Global Environmental Change). Declaran que estos informes sucesivos han subestimado los efectos del calentamiento:
-Las primeras previsiones del IPCC anunciaban un aumento del nivel del mar de 2mm/año. Hoy habla de 3,2mm/año.
-El hecho de no tomar en cuenta el potencial amplificador del permafrost en el deshielo introduce un error importante en los resultados sobre la estimación del calentamiento.´
-Esta “actitud científica conservadora” se manifiesta también en la manera en que los expertos del IPCC anticipan el ritmo de las futuras emisiones por los humanos de los gases invernaderos. De las diferentes hipótesis de desarrollo económico elaboradas en sus modelos en 1999, de la más optimista a la más pesimista, al final es esta última la que se ha realizado en la década siguiente. ¿Cuál es la razón que les impide imaginar una situación peor que la que tenemos en la realidad? Probablemente conviene tomar en cuenta la presión de los gobiernos…
-En general, las comunidades científicas se muestran muy conservadoras. Llegan a considerar lo que se llama “principio de asombro”: una hipótesis o un resultado tiene más posibilidad de ser aceptado si sus aspectos espectaculares o dramáticos no impactan.
Comentarios
1-La geo-ingeniería introducida en el informe puede ser una grieta abierta para investigar nuevos métodos de lucha contra el calentamiento sin reducir las emisiones de gases invernaderos. Puede encontrar el apoyo de ciertos lobbies de la industria y particularmente de los sectores emisores de gases. ¿Podemos estar seguros de la separación de las esferas de influencias de los estudios sobre los dispositivos de manipulación del clima que el GIEC integra a partir de ahora? Si el papel de los expertos es decir las cosas, avisar, no tienen que preconizar decisiones, las cuales corresponden al debate democrático de la ciudadanía militante o política donde aparecen otros factores.
2-es difícil aprehender la evaluación de los escapes de metano del permafrost, provocados por el deshielo de las regiones polares . Además, el desarrollo de la nueva energía por extracción del gas de esquisto libera todavía más metano: su combustión produce menos dióxido de carbono que el petróleo o el carbón, pero el riesgo de liberación directa de metano en la atmosfera es grave porque su efecto es fuertemente invernadero.
3- Las acciones individuales no corresponden a la misma escala que las colectivas, estatales o internacionales. Aparte la conducta de cada uno con respecto al transporte o la calefacción, conviene acercar la acción individual de los centros de elaboración política y de decisiones: colectividades, ayuntamientos y regiones.
Una cumbre mundial de las ciudades y territorios sobre el clima organizada en Nantes (Francia) ha coincidido con la publicación del informe del IPCC. Los firmantes de la declaración de la cumbre señalan “estar seriamente preocupados por las amenazas que pesan sobre la vida humana por causa de la degradación de las condiciones medioambientales mundiales… que ponen en peligro el acceso sostenible al agua y al alimento…Nos comprometemos para tomar en cuenta en nuestros presupuestos locales la financiación necesaria a la realización de acciones con baja intensidad en carbono”.
Para que tal declaración no se quede al nivel de las buenas intenciones, los ciudadanos tenemos que sensibilizar más estos lugares de decisión y presionarles con respecto a las infraestructuras de transporte y el desarrollo urbano (calefacción y refrigeración…) y agrícola (reforestación, aguas…) con un mejor conocimiento de la gestión de los recursos de la planeta por nuestra parte.
Conviene actuar también en el espacio de la educación pública. La formación escolar tiene que tomar en cuenta más ampliamente el estudio del planeta.
Se trata de tener una actitud realista y constructiva. No es con el miedo –que ciertos medios informativos propagan tan bien – con lo que podemos progresar en la lucha contra el calentamiento.
Enlaces
Artículo de Le Monde del 27/09/2013
Página de IPCC
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