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«El humano no vive solo de sus asesinatos, también necesita recompensas y una buena comida». (Alfred Hitchcock)
Quiero añadir que vivo para complacerme, en particular darme el gusto de volver a mi "primer amor en América": el cine negro. ¿Cómo volver? Puedo volcarme en uno o varios aspectos: ambientación con los bares y el cigarro, el detective, la femme fatale, la fotografía o la música. ¿Podría intentar buscarlos en las películas que me vienen a la memoria así, sin ningún orden o asociándolas? Ya veremos…
¿Asociándolas?…
Entre todas las escenas que se asoman a la puerta de mi memoria, hay esta secuencia notable que recuerdo en dos películas. Por supuesto, no están puestas en escena de la misma manera y una de estas secuencias es famosa. Se trata de Sabotage ("Sabotaje"-Alfred Hitchcock-1936 basada en la novela de Joseph Conrad "El agente secreto") y The Lady from Shanghai ("La dama de Shangai-Orson Welles-1947). La asociación ha sido probablemente relevante para otros: se trata de la secuencia del acuario.
¿Qué pasa en cada una de estas películas?
En Sabotaje,
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el jefe del grupo terrorista ha dado una cita en un acuario de Londres
a uno de los protagonistas encargado del próximo atentado
y le da a leer una nota al respecto.
A continuación, le chantajea en cuanto al dinero que le debe, para presionarlo ya que la operación es mucho más criminal que la anterior. |
En La dama de Shangai,
…en la cita en el acuario entre O'Hara-Welles y Rosalía Bannister-Rita Hayworth,
…él le da a leer su confesión del asesinato que va acometer, dictada por su futura víctima.
Ella ve en eso una trampa de su marido. ¿A quién creer? ¿Quién chantajea al otro?
A pesar de las diferencias fundamentales de ritmo y de duración entre las dos secuencias, llama la atención el parecido entre ciertos planos. ¿Conocía Welles la película de Hitchcock?
Lo más interesante en Sabotaje…
…son los peces de Hitchcock. Son tan vulnerables.
Se van a transformar en pequeños seres, frágiles víctimas …
….del desmoronamiento de los edificios bajo el efecto de las bombas,
aquí, dentro del acuario… en la imaginación del "terrorista aterrorizado".
En cuanto a los peces de Welles, estos, son unos verdaderos tiburones.
Son los mismos que hemos fácilmente descubiertos desde el principio de la película,
estos monstruos contra quienes tiene que luchar un solo hombre, O'Hara-Welles.
Eso me lleva a recordar otros monstruos.
Por ejemplo, esos, temibles, contra quienes lucha Mike Hammer en Kiss me Deadly ("Beso Mortal"-Robert Aldrich-1955).
No hay acuario pero los tiburones están aquí.
Hay un terrorismo posible, mucho más mortífero
–no vamos a contar el final –
y los tiburones están hasta en el FBI.
En las páginas siguientes, volveremos sobre estas películas y tantas otras que traducen las fuerzas del poder, estas relaciones humanas, entre dominantes y dominados.
Continua...