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El 13 de Octubre de 2015, los países europeos desvelan su posición sobre el cultivo de los transgénicos. Un número creciente de Estados miembros dan la señal de una falta de confianza en las evaluaciones de la Comisión Europea y de su rechazo a los productores de semillas transgénicas, oponiéndose a su entrada en sus territorios. Podemos lamentar la posición contraria de España que tiene el casi monopolio de tales cultivos en Europa, y que demostró claramente la influencia de los lobbies industriales y de la biotecnología sobre los políticos, después de las revelaciones de WIKILEAKS que recordamos más adelante.
Otra noticia reciente (Le Monde del 14 octubre): después del asunto Volkswagen, otro asunto pone en evidencia la carencia de los procedimientos europeos en cuanto a la evaluación de los riesgos tecnológicos. Unos maíces transgénicos comercializados por Syngenta (agronomista suizo) y autorizado en Europa desde hace unos cuantos años para la alimentación humana y animal, llevan modificaciones genéticas que no corresponden a las que fueron mencionadas a las autoridades europeas. El 20 de julio, la firma de biotecnología escribe a estas autoridades para anunciar que “no hay implicaciones para la salud humana y animal o para la evaluación del riesgo medioambiental”… El asunto pone de manifiesto la falta de seriedad de los controles europeos de los transgénicos. Esta situación se debe al hecho de que la evaluación de los riesgos se realiza esencialmente sobre la base de los datos transmitidos por la misma firma (no hay un protocolo independiente por parte de las autoridades europeas).
Conviene hacer notar la “guerra de influencias” librada por la agricultura biológica frente a los industriales de las firmas de biotecnología, en particular Monsanto, Dow Chemical y Ketchum, la sociedad de relaciones públicas que representa los intereses de estas firmas, de Bayer, de Du Pont y otros… El New York Times del 5 de septiembre revela cómo la asociación US Right to Know, financiada en parte por la agricultura biológica, ha puesto en evidencia los lazos de estas firmas con universitarios biólogos, agrónomos… para defender sus intereses. Por ejemplo, un biólogo profesor en la Universidad de Florida es un miembro del grupo de presión (Lobby) que ha desarrollado una estrategia para impedir el etiquetado obligatorio sobre el contenido en Transgénicos en ciertos Estados o para impedir recientemente al Congreso de legalizar el etiquetado en todos los Estados. Este biólogo recibe de Monsanto, en agosto de 2014, una financiación de 25 000 dólares “para proseguir con su trabajo de influencia. El vice-presidente de la Universidad de Mississipi recibe una subvención de Monsanto de 880 000 dólares para el departamento Investigación-Desarrollo a cambio de intervenciones a favor de la autorización de nuevas variedades de cultivo de soja y algodón. También tiene subvenciones por parte de Dow Chemical con las mismas intenciones… Un profesor de nutrición en la Universidad de Illinois tiene una subvención de Monsanto para promover las biotecnologías vegetales…
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CULTIVOS Y LAS IMPORTACIONES DE “TRANSGÉNICOS” EN EUROPA:
1-Hasta 2014, los bloqueos de distintos Estados tienen por consecuencia el cultivo de un único transgénico: el maíz MON810 de Monsanto cultivado desde 1998 en España (132 000 hectáreas), y Portugal (9 000 hectáreas); lo que representa el 95% de la producción en Europa. Los 5% restantes se reparten entre Chequia (997 hectáreas), Eslovaquia (105), Rumania (2,5). Otros países adoptan una moratoria sobre el MON810 (Francia, Alemania, Austria, Bulgaria, Grecia, Hungría, Italia, Luxemburgo, Polonia).
2- los productores europeos de semillas de transgénicos que tenían autorización por la Comisión han abandonado: Bayer con el maíz T25 y Syngenta con el maíz Bt176. BASF, con la patata Amflora, paro en enero de 2012 para seguir sus actividades de investigación en los EEUU. Así que la producción está actualmente en manos de los EEUU (69 millones de hectáreas), Brasil (unos 36), Argentina (24).
3-A pesar de la hostilidad del público europeo, las importaciones no han parado durante todo el proceso de autorización de cultivo: 51 organismos transgénicos están autorizados en el mercado europeo según Inf’OGM: maíz, algodón, remolacha, patata y ante todo, soja para el cual ningún organismo quiere comunicar las cantidades importadas en Europa.
PROYECTO DE REFORMA DEL PROCESO DE AUTORIZACIÓN DEL CULTIVO
Julio de 2010
El voto a la mayoría cualificada en vigor para este tipo de decisión crea tensiones entre pro y anti transgénicos que no permite tener una posición clara sobre una moratoria o no para el cultivo de transgénicos (hasta ahora el maíz MON 810 de Monsanto y la patata Amflora de BASF). La Comisión Europea (CE) en Bruselas presenta a los Estados miembros de la Unión Europea (UE) un proyecto de reforma que deja estos Estados libres para decidir en cuanto a su territorio. La posición de la CE consiste en que “la ciencia debe indicar la vía y debemos actuar para que el proceso científico en la Agencia Europea de seguridad de los alimentos (EFSA) sea más fuerte para todas las tecnologías innovadoras” (Le Monde-del 14/07/2010).Sin embargo, unos cuantos países critican los métodos de la EFSA y, a pesar de conclusiones científicas que anuncian la ausencia de riesgos, les parece más importante tomar en cuenta a priori el principio de precaución. Para los ecologistas del Parlamento Europeo la proposición de la CE crea un efecto llamada para los productores de semillas y los industriales. “Mientras la CE no verifica los riesgos que pueden presentar los transgénicos para la salud y el medioambiente ningún transgénico debe ser autorizado en Europa” dice Greenpeace.
Enero de 2011: los informes de WIKILEAKS en la línea del futuro TTIP
En Le Monde 25/01/2011: los informes de WIKILEAKS sobre los movimientos de los servicios diplomáticos estadounidenses ponen en evidencia los esfuerzos de los EEUU para empujar a Europa en la dirección de los transgénicos.
La embajada de los EEUU en Francia escribe en un informe, en septiembre de 2007, que “personas favorables a los transgénicos, hasta en la Federación nacional de los sindicatos agrícolas, consideran necesario sancionar [al gobierno francés] si no se consigue desbloquear el dossier Transgénicos.
En el lado opuesto, la embajada de los EEUU en Madrid señala en mayo de 2009, que, el secretario de estado de la agricultura del gobierno español pide al gobierno estadounidense “mantener la presión sobre Bruselas” a favor de los Transgénicos.
En Italia, los diplomáticos estadounidenses, subrayan que el problema de las plantas transgénicas “es el único verdadero punto de desacuerdo con el gobierno italiano”. La embajada se acerca al Vaticano, insistiendo sobre “el imperativo moral” que representa el cultivo de los transgénicos por ser útiles a la agricultura de los países pobres.
En algunos informes desvelados por WIKILEAKS, Washington llega a amenazar. Es el caso de la región de los Grandes Lagos africanos: la ayuda estadounidense estará ligada, entre otras exigencias a “la aceptación por los gobiernos de alimentos génicamente modificados” según un informe diplomático de 2006.
REFORMA DEL PROCESO DE AUTORIZACIÓN DE CULTIVO
Febrero de 2014
Los Estados miembros de la UE votan en contra de la producción de otro maíz transgénico, TC 1507 del estadounidense Pioneer. Pero no se trata de una mayoría cualificada según las reglas de la Comisión. Esa da más adelante su autorización a Pioneer lo que cambia la dinámica en contra de los transgénicos en Europa.
Junio de 2014
Los Estados de la Unión Europea dan su acuerdo para reformar el proceso de autorización de cultivo en Europa de los Transgénicos. El proyecto de reforma deja a cada Estado miembro la elección entre autorización y prohibición para el cultivo en su territorio. Los que deciden prohibir, deben negociar con los productores de semillas, bajo el control de la Comisión. Si los productores se oponen, los gobiernos podrán prohibir la siembra si tienen motivos “serios”: consideraciones económicas, política medioambiental y agrícola… No podrán prohibir el paso de los transgénicos por su territorio porque no pueden oponerse a la autorización en los demás países.
Para los anti-transgénicos y los expertos, los criterios socio-económicos y no científicos para motivar la prohibición pueden exponer al país refractario a las demandas de los productores en el marco de la OMC (Organización Mundial del Comercio).
¡CON O SIN TTIP!
El 13 de enero de 2015
El Parlamento Europeo adopta con amplia mayoría (480 contra 159 votos) la reforma de la autorización de cultivo de los transgénicos lo que facilita y acelera la entrada de los productores extranjeros a Europa, Monsanto y otros.
Una firma de biotecnologías puede recurrir contra un Estado europeo que quiera oponerse a un transgénico utilizando unos mecanismos de arbitraje privado previstos en numerosos tratados bilaterales o internacionales si demuestra que sus inversiones en este Estado se encuentran perjudicadas. La OMC puede también sancionar las decisiones políticas basadas en argumentos socio-económicos y no científicos.
13 de Octubre de 2015
Los países europeos que han pedido estas últimas semanas la prohibición del cultivo transgénico en su territorio son: Alemania, Francia, Bulgaria, Letonia, Grecia, Croacia, Austria, Hungría, Polonia, Holanda, Lituania, Italia Dinamarca. Reino Unido lo ha hecho en nombre de Escocia, Gales e Irlanda del Norte; Bélgica lo ha hecho para Valonia. ¡Echamos de menos la presencia de España en esta lista!
Para la CE (descaradamente favorable a los transgénicos), el hecho de que los Estados miembros puedan oponerse a estos cultivos “no cambia nada en cuanto a los informes científicos de Bruselas que precisan que los transgénicos no presentan riesgos para la salud”.
Para las ONG es un movimiento político y ciudadano que significa que un número creciente de Estados no tienen confianza en las evaluaciones de la Comisión Europea: “La decisión democrática de los países que rechazan los cultivos transgénicos debe ser respetada por la industria de las biotecnologías” dice la portavoz de los Amigos de la Tierra Europa.