EL ESPIGADOR
nº9
En Liderazgo y soberanía (dossier LAS REGLAS DEL JUEGO) hemos tratado del papel de los EEUU dentro del imperio del mercado globalizado. Zbigniew Brzezinki es un dirigente del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, fue el consejero de seguridad nacional de Jimmy Carter. En una entrevista con el diario francés Le Monde, hace las reflexiones siguientes que enriquecen este dossier:
«América debe reafirmar su leadership en el siglo XXI y su compromiso con ciertos principios fundamentales, justicia, dignidad, igualdad: el mensaje humanista de América… La combinación del idealismo y del materialismo es algo muy potente y que funciona»
Los EEUU de América del Norte siguen identificándose con el Continente "América".
Detrás de la verborrea de los políticos cuando recuerdan los fundamentos de la vida social de la humanidad, se transparenta aquí la ideología que caracteriza la máquina estadounidense en su liderazgo del imperio mercantil.
Sigue Zbigniew Brzezinki : «El liderazgo americano es el resultado de su capacidad para emprender y, a la vez, de inmensas calamidades. Es el resultado de circunstancias que han hecho coincidir la voluntad de aislacionismo de los americanos con los terribles desastres que los Europeos se han impuesto como un castigo…»
Extraña coincidencia: los estadounidenses se presentan como los salvadores, a regañadientes, de una Europa condenada a una supuesta fatalidad destructiva. ¿No es este espíritu empresarial lo que ha alentado la maquina de guerra nazi? ¿No es este mismo espíritu el que ha permitido la integración de antiguos científicos comprometidos en Alemania en el sistema de producción e investigación estadounidense?
Brzezinki : «Lo que me parece más inquietante con respecto a América es la prueba que da de esta clase de ignorancia satisfecha, algo que se puede constatar hasta los niveles más altos… Cuando se trata de cuestiones relativas a los asuntos exteriores, uno se enfrenta con una ignorancia profunda y embarazosa».
¿Puede la democracia constituir un obstáculo a la política exterior? Brzezinki : «Absolutamente. Eso se hace todavía más complejo cuando se vive en una sociedad en la cual un evento terrible ha instilado el miedo que un gobierno demagógico ha generalizado en una conspiración mundial en contra de América».
A pesar de sus críticas al gobierno republicano anterior, este alto funcionario del partido demócrata reconoce que los eventos del 11 de Septiembre 2001 pueden justificar el no respeto de los valores democráticos en las acciones bélicas hacia otros países o individuos. Puede dejar perplejo la transparencia, si no la ingenuidad, de su constatación de la ignorancia de las esferas de decisión a las cuales él pertenece, aunque no suele sorprender al europeo que ha practicado el Imperialismo durante tantos siglos. Los que tiemblan por su inseguridad verán sus miedos crecer si se atreven a pensar ¡en qué manos estamos!