7.9.11

Miedo y Mass media

EL ESPIGADOR
 nº14



El miedo… es el padre de la violencia. Quizá por eso un autor como Montesquieu lo consideraba una " pasión tiránica"… El miedo existencial al otro siempre va acompañado de un proceso de "demonización" de ese otro. La demonización se alimenta del miedo y del odio. Y cuando se convierte en algo aceptable, en parte del discurso político ortodoxo, crea un clima que propicia la violencia.
(Ramín Jahanbegloo- filósofo iraní catedrático en la Universidad de Toronto)


En los países totalitarios, donde reina la cultura del miedo, el control y la censura de los medios de comunicación por el Estado es una evidencia. Pero en las sociedades autoproclamadas "democracias avanzadas", es mucho más difícil ponerlos en evidencia y, a veces, los medios de comunicación privados son los que controlan el sistema político y propagan la cultura del miedo. Recordamos aquí la publicación en este blog de la página ¿Qué opinas de los medios de comunicación? Y su referencia a la carta de Peter Watkins.



Aunque los mass media intentan velar su propaganda con las denuncias de fraudes, corrupciones o incompetencias de las instituciones políticas o empresariales, en una apariencia de libre expresión para el bien común, esta propaganda se revela tan eficaz como en los sistemas dictatoriales.

Hay unos presupuestos en los editoriales, los debates y el conjunto de las informaciones políticas, económicas o de sociedad que no se cuestionan: la información pasa de modo imperceptible por el filtro del dinero y del poder para presentarnos una visión del mundo conforme a los intereses de la élite dominante de la nación. Estos presupuestos de las televisiones y los grandes medios de prensa han sido analizados por Noam Chomsky y Edward S. Herman que han puesto en evidencia "la fabricación de un consentimiento": los que buscan su información en los mass media llegan a consentir una regla del juego que les lleva a transformarse en órganos de propaganda de sus medios favoritos.

Este consentimiento se "fabrica" sobre la base de cinco filtros:
1-la concentración de los medios en pocas manos sitúa como prioridad el interés de sus compañías
2-la publicidad, que representa la fuente de ingresos principal de estas compañías, actúa como medio de presión sobre la información que presentan
3-la ciega confianza de estos medios en las fuentes de información oficiales, gobiernos, expertos… los cuales son dependientes de las instituciones de poder y de los grupos de presión, o sea las élites dominantes. Los editoriales, artículos de opinión, reportajes… utilizan estas fuentes sin distanciamiento o puesta en duda.
4-la presión que ejercen estas élites sobre los medios y sus críticas abiertas sirve para disciplinar la información
5-la hostilidad de los grandes medios de televisión o de prensa, escrita o en red, con respeto a las perspectivas izquierdistas, socialistas es evidente así como la sospecha disimulada acerca de la acción ciudadana pronto designada como activismo, la denuncia de la violencia de la juventud de barrios periféricos en oposición al interés por la violencia de Estado –justificando así el monopolio de la violencia por el Estado.

Estos filtros mediáticos están casi institucionalizados, "fabrican el consentimiento" del lector que asienta su comprensión del mundo social y político-económico sobre estos grandes medios. Muy probablemente, están integrados en el inconsciente de sus periodistas, que creen en una interpretación objetiva de la información que les transmiten las élites.

Ahora bien, los titulares actúan como síntesis –generalmente simplista o de dudosa interpretación, y reclamo –se busca en ellos impactar, escandalizar… vender. La presentación de la portada, con su título y sus imágenes, se confían a unas manos obedientes




ALGUNOS EJEMPLOS

"El temor a la recaída hunde los mercados" título abarcando cinco columnas en portada

"El miedo a la recaída hunde los mercados" título abarcando cinco columnas en página Economía "Crisis financiera: El temor a la recesión" (El País 05/08/11)

"El miedo cierra tiendas y bares en un Londres tomada por 16 000 agentes" título abarcando cuatro columnas en portada (El País 10/08/11)


Ofrecemos también estos dos otros ejemplos de un interesante dossier "Tecnicas de desinformación, manual para la lectura crítica de la prensa", fruto de casi tres años de trabajo, de aprendizaje y de investigación del G.A.C. (Grupo de Aprendizaje Colectivo) de Comunicación Popular

EL PAIS 17/4/99. El titular de la columna dice "El Pentágono sospecha que Belgrado tiene un arsenal químico". Sorprendentemente, el contenido de la noticia denuncia la utilización constante por parte del Pentágono de propaganda y filtraciones a la prensa de "sospechas "de este tipo (por supuesto, imposibles de confirmar), como un arma más para demonizar a determinadas personas o países (Milósevic ahora y antes Sadam Hussein) y justificar ante la opinión pública sus guerras. La propia noticia que da cuenta de la manipulación informativa está, por sí misma, ejerciendo la misma manipulación a la que se refiere, para la mayoría de lectores que tan sólo lean el titular de una noticia secundaria.

Otro buen ejemplo es el titular de la noticia de EL PAIS (diario "independiente") del 13/2/99, el cual valora de forma tajante como fracaso el intento de IU de reunir 500.000 firmas por la ley de 35 horas ("IU fracasa en su intento de acopiar 500.000 firmas por las 35 horas ". Pero leyendo el texto se descubre que el plazo para reunir las firmas aún no ha terminado, por lo que de ninguna manera se puede afirmar todavía que la iniciativa sea un fracaso. De hecho, tres meses después (el 23 de mayo) IU ya había logrado hasta 700.000 firmas.
Y unos cuanto más...