El sociólogo y filósofo alemán, Ulrich Beck, nos recuerda –en un artículo de Le Monde del 27 de Diciembre 2011 –que la crisis griega pone en evidencia «una realidad encubierta, entre bastidores» Hablando del ex-primer ministro griego Papandreu que se proponía consultar a los ciudadanos griegos con respecto a la tutela Europea y del FMI, dice Ulrich Beck: «¡Él que se atreve a practicar la democracia, en una Europa tan orgullosa de ésta, se vuelve una amenaza para Europa! Papandreu tuvo que renunciar a la democracia». Las recientes elecciones o los cambios de gobierno sin elecciones, en los países fuertemente endeudados han permitido, con la desinformación necesaria, instalar a los políticos que hacían falta para someter estos países a las nuevas reglas del juego y a las imposiciones de los más fuertes.
Beck reconoce así la posdemocracia denunciada ya por Habermas (ver el enlace en [1])
. Con la excusa de una crisis económica organizada por los poderes políticos elegidos, se ha puesta en marcha esta posdemocracia y, ahora, parece tarde para saber con qué tipo de Europa soñamos. Para Ulrico Beck, «parece que sea muy tarde, por lo menos para los griegos, los italianos, los españoles…Los planes de ajuste económico se han revelado suicidas para los dirigentes de los Estados endeudados, tuvieron que dejar el sitio a otros. Primero fue el caso de Irlanda y Portugal, después Grecia, Italia y España». Así, progresivamente, estos países se encuentran tutelados.
Ulrich Beck hace la siguiente hipótesis «Una nueva lógica de poder está surgiendo… el poder obedece a una lógica de imperio, económico y no militar, que sabe establecer la diferencia entre países deudores y países endeudados… Su fundamento ideológico es lo que llamo el "euronacionalismo alemán", o sea una versión europea del nacionalismo del deutschemark».
Así, en el imperio del mercado globalizado que tratamos en el Dossier LAS REGLAS DEL JUEGO, a partir del texto Imperio de Toni Negri, Europa se está volviendo propiedad de un "sub-imperio euronacionalista alemán". Conviene notar esta frase estremecedora de Beck: «Por eso, parece absurdo hablar de "Cuarto Reich"» que subraya la situación de prolongación del Tercer Reich en la cual nos encontramos, con una cultura alemana que tiene, con respecto a los demás países europeos, una fuerza de atracción (sobre todo para las derechas y extremas derechas europeas) y, en la actualidad, un poder de sanción. Con una mezcla de «rigor protestante y de cálculo europeo» se está levantando en este euronacionalismo alemán, «una directriz de intervenciones político-económicas en los países de la zona euro que han "pecado". Se trata nada menos que de "civilizar" un Sur derrochador, en nombre… de Europa». La divisa de este sub-imperio es: «nuestra política es tanto más europea cuanto más alemana»
Beck ilustra su hipótesis con esta comparación irónica y preocupante: este imperio euronacional alemán se presenta como una variante europea de la Unión Soviética, «una Europa de los aparachiks, con un Politburó en Bruselas o Berlín. Su economía está centralizada y planificada para reducir las deudas». Ángela Merkel ha anunciado que se confiará su aplicación a "unos comisarios sobre la base de unos mecanismos de sanciones". Esta planificación lleva a desposeer de la democracia a los países debilitados por una crisis planificada. Se está poniendo en marcha «una Europa que existe concretamente… sin los Europeos».
Beck se une a todos los "indignados" de la Tierra, haciendo, con este artículo, un llamamiento para una democracia directa, preconizando «una sociedad civil europea, un compromiso cívico europeo… una nueva Asamblea constituyente… una "Comunidad Europea de las democracias" con un reparto de la soberanía que demultiplica el poder y la democracia»
¿Tenemos los medios para crear lo que Ulrico Beck, como tantos otros, llama una Europa de los ciudadanos? ¿Los medios? Con la herramienta que estoy utilizando ahora mismo, así como el eventual lector de este texto, ¿no podemos poner en marcha esta Asamblea constituyente que se nos han robado en la creación de la Unión Europea? ¿No podemos organizar una plataforma de los ciudadanos europeos, rica en millones de individuos que esten dispuestos a dibujar un proyecto político y económico tomando en cuenta las poderosas enseñanzas de la historia y la geografía de este continente?¿Cuánto tiempo más estaremos dispuestos a someternos a las REGLAS DEL JUEGO que unos poderes cada vez más alejados del ciudadano –el cual sirve para dar su voto –han establecido en el marco del imperio del mercado globalizado, tantas veces ya denunciado en este Blog? [2]
[1]Europa y la democracia: Habermas reabre el debate
[2]jVer también en este Blog: Germany vs Spain I - Germany vs Spain II